Iniciarse en realizar ejercicio físico dirigido es una elección maravillosa para cuidar nuestra salud. Y si es con un deporte que te motive, mucho mejor. Conseguirás que se convierta en un hábito, ya que disfrutas con él. Hay muchas dudas sobre modificar la alimentación si se empieza a realizar ejercicio de forma regular. Y hoy hablaremos de ello.
La alimentación debe de ser saludable en todos los casos, pero ojalá todos combinaran la actividad física diaria con la elección de alimentos que nutran nuestro cuerpo. Esta es la mezcla perfecta para sentirnos sanos y mantenerlo en el tiempo.
En personas que se inician, hay que realizar pocos cambios frente a las recomendaciones generales. Pero es importante tener en cuenta varios aspectos.
- Calidad de los alimentos: imprescindible la presencia de alimentos frescos y mínimamente procesados en cada comida. Consumo de verduras y hortalizas a diario por la presencia de antioxidantes que participan en la contracción muscular, mejoran el cuidado del corazón, etc. Aceite de oliva virgen extra o frutos secos crudos o tostados sin sal son fuentes de grasa ideales para el día a día en tu alimentación.
- Proteínas: en cada comida incluye alimentos ricos en proteínas. Legumbres, huevos, pescados, mariscos y carnes magras. Varía a lo largo de la semana, incluso combina entre ellos. Es el pilar del desarrollo muscular. Preocúpate más de aumentar tu masa muscular que únicamente de la pérdida de grasa.
- Hidratación: fundamental para el control de tensión arterial y el cuidado de la circulación. El agua debe de ser la base de la hidratación, siente tu cuerpo y bebe cuando tengas sed.
- Número de comidas: depende de cada persona, del ejercicio que se realice y de la frecuencia con la que se haga. Realizar tres comidas principales: desayuno, comida y cena son una buena base siempre que aportemos todos los nutrientes (verduras/alimentos proteicos/grasas/cereal o tubérculos (opcional según situación) /frutas). Hacer las comidas más nutritivas y evitar picoteos sin tener hambre real es genial para nuestra alimentación.
- Suplementación: hay muchas personas que piensan que necesitan suplementarse nada más empezar con el deporte. Si pensáramos en una pirámide, la suplementación sería lo último, estaría en la cima. La base debe de la alimentación de ser una buena elección de alimentos. Y finalmente, valorar si necesitas suplementarte, siempre de la mano del profesional sanitario.
- Descanso: imagina cómo es la cadena de una bicicleta, es la que permite que las ruedas se muevan y avances. Ahora piensa que ocurre si quitaras un eslabón de esta cadena ¿verdad que la bicicleta no se podría mover? Eso mismo ocurre si realizamos ejercicio, elegimos los mejores alimentos, nos hidratamos correctamente y resulta que nos falta el descanso necesario. El cuerpo se para como la bicicleta. Descansar correctamente es fundamental para nuestra salud, nos recarga de energía. Intenta marcar unas rutinas para levantarte y acostarte, rendirás mucho mejor haciendo deporte y en tu vida diaria.
REBECA PASTOR. Dietista-nutricionista . Colegiada número MU00043. www.mypersonalfood.es