La incorporación de dos nuevos aceleradores lineales al Servicio de Oncología Radioterápica del hospital Virgen de la Arrixaca aumenta la capacidad de realizar tratamientos a los pacientes de cáncer
Con estos equipos se consigue una importante mejora terapéutica, se reducen los tiempos y el número de sesiones administradas, lo que conlleva menos desplazamientos de los pacientes y menores efectos secundarios.
Con la incorporación de estos dos aceleradores lineales, el hospital renueva dos de los tres aparatos con los que contaba con otros de nueva generación. A ellos se sumarán otros dos nuevos en las próximas semanas y cuyas obras están en curso, por lo que la Arrixaca dispondrá de cinco aceleradores lineales. Cuatro serán máquinas de última tecnología y una de alta gama, lo que sitúa al hospital como uno de los de mayor capacidad asistencial a nivel nacional.
Terapias de mayor calidad y precisión
El consejero de Salud, Juan José Pedreño, visitó las instalaciones del hospital que albergan esta tecnología y destacó las ventajas de contar con estos medios. “Supone poder atender a más población, acortando listas de espera, y asumir pacientes de otras áreas de salud y, sobre todo, dando las terapias con mayor calidad y precisión, aumentando su potencial curativo”.
Pedreño resaltó que estos aceleradores lineales permiten la radioterapia adaptativa, ya que previamente a cada sesión “se escanea al paciente, valorando una y otra vez el volumen real del tumor, su posición y consistencia, para ajustar dosis exacta requerida”. Resultado de ello es “la disminución de intervenciones quirúrgicas necesarias, la prevención de consecuencias derivadas del crecimiento tumoral o radiación de órganos sanos”.
Inversión para alojar los aceleradores lineales
La inversión en las primeras dos máquinas suma cerca de 6,8 millones de euros, aportados por el Servicio Murciano de Salud, la Fundación Amancio Ortega y fondos Inveat. A ello se sumarán otros cerca de 5 millones en los dos aparatos cuya llegada está prevista en próximas semanas.
La obra civil que se ha requerido para alojar los nuevos aceleradores lineales, también incluye consultas, salas de espera y despachos.
Por otra parte, el Servicio de Radioterapia gana espacio, ya que ocupaba hasta ahora 1.770 metros cuadrados y ha ganado otros 1.030, con lo que se ha ampliado a casi el doble.
Para cada una de las máquinas ha sido precisa la construcción de un bunker de hormigón baritado, material necesario para el total aislamiento de las radiaciones emitidas.